BOCCACCIO Y SU ÉPOCA
Giovanni Boccaccio nació en 1313, probablemente en Certaldo, aunque él nos hace creer que nació en París, y algunas fuentes dan como lugar de nacimiento Florencia. Era hijo ilegítimo del mercader Boccaccio di Cellino, agente de la poderosa compañía mercantil de los Bardi, y de una desconocida. Boccaccio vivió en Florencia hasta 1325 o 1327, cuando fue enviado por su padre a trabajar en la oficina que la compañía de los Bardi tenía en Nápoles. Debido a su escasa inclinación para los negocios, estudió Derecho canónico, para más tarde dedicarse al estudio de las letras, su verdadera vocación.
Con 23 años conoció a Fiammetta (“Llamita”), cuya figura dominará su creación literaria hasta el Decamerón. Identificada como María de Aquino (hija ilegítima del rey Roberto de Anjou y esposa de un gentilhombre de la corte), Fiammetta constituye un vivo contraste, humano y realista, con Beatriz y Laura. Fiammetta abrió a Boccaccio las puertas de la corte y, lo que es más importante, lo impulsó en su incipiente carrera literaria. Bajo su influencia escribió Boccaccio sus novelas y poemas juveniles. Se sabe que fue Fiammetta la que puso fin a la relación entre los dos, y que la ruptura causó a Boccaccio un profundo dolor.
En 1340 regresó a Florencia a causa de un grave revés financiero de su padre; de este período florentino cabe destacar dos acontecimientos que influirían tanto en su vida como en su obra: presenció los estragos causados por la peste negra de 1348, situación que serviría de marco al Decamerón, e inició su amistad con Petrarca, que lo animó a interesarse por los estudios clásicos. A partir de entonces, la casa de Boccaccio se convirtió en un importante centro de actividad humanística.
Tras la muerte de su padre en 1349, Boccaccio se estableció definitivamente en Florencia, para ocuparse de lo que quedaba de los bienes de su padre. Llegó a ser un personaje apreciado por su cultura literaria. El Decamerón fue compuesto durante la primera etapa de su estancia en Florencia, entre 1349 y 1351. Su éxito le valió ser designado por sus conciudadanos para el desempeño de varios cargos públicos. En 1351 le fue confiado el encargo de desplazarse a Padua, donde vivía Petrarca, a quien había conocido el año anterior, para invitarlo a instalarse en Florencia como profesor. Aunque Petrarca no aceptó la propuesta, entre ambos escritores nació una sincera amistad que se prolongaría hasta la muerte de Petrarca, en 1374. Una enfermedad le causó la muerte en diciembre de 1375.
Su contexto
La obra de Boccaccio se enmarca en la transición entre la Edad Media y el Renacimiento. Aunque sus escritos aún poseen rasgos medievales, el autor del Decamerón inaugura, junto con Dante y Petrarca, el Renacimiento para la literatura europea. Durante lossiglos XIV y XV (y para ciertos factores ya desde el XIII), la sociedad medieval va experimentando cambios en todos sus órdenes: estos cambios, graduales y paulatinos, la van llevando progresivamente hacia el Renacimiento.
Florencia será el centro de esos cambios, tomando el testigo de Provenza. En estos siglos Florencia se convierte en una república independiente, en la que la burguesía comercial y los grandes gremios sustituyen a las viejas familias aristocráticas en el gobierno de la ciudad y extienden su influencia a toda Europa. Se trata de un periodo de enorme riqueza artística y literaria, cuyos representantes principales son Dante, Petrarca y Boccaccio, máximas figuras del Trecento italiano.
Nacido en Florencia, Dante Alighieri es el autor de una de las obras fundamentales de la transición del pensamiento medieval al renacentista: la Divina Comedia, considerada la obra maestra de la literatura italiana y una de las cumbres de la literatura universal. Dante es uno de los representantes del dolce stil nuovo, un nuevo estilo que eliminó la relación de vasallaje de la literatura provenzal e incorporó el motivo del poder beatificador de la amada y su influjo espiritual sobre el amante. La mujer es la donna angelicata, mensajera y compendio de lo celeste. Su pasión por Beatriz, a la que conoció con nueve años, inspirará la obra de este autor.
Nacido en Arezzo, la lírica de Francesco Petrarca dio lugar a una corriente literaria, caracterizada por nuevas formas y temas que influyeron en autores como Garcilaso de la Vega, y que se denominó petrarquismo. Su obra maestra es el Cancionero, obra escrita durante más de cuarenta años y dedicada a Laura, su gran amor; en ella desarrolla Petrarca su concepción del amor, el petrarquismo, que tendrá una enorme influencia en la literatura posterior: devoción a la amada, aceptación del sufrimiento que ello supone, muerte de la amada, deseo de salvación a través del amor… La obra está compuesta por 366 poemas, distribuidos en dos secciones tituladas “In vita” e “In morte”, además de un soneto prólogo y una canción final dedicada a la Virgen María.
Junto a Boccaccio, Dante y Petrarca figuran entre los precursores que anticipan en el siglo XIV una nueva concepción del mundo centrada en el hombre y su creatividad. Los tres autores sentaron las bases tanto del Humanismo como del Renacimiento.
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